En nuestra búsqueda por mantener la limpieza en el hogar, a menudo caemos en el error de creer en ciertas afirmaciones que, aunque se han repetido de generación en generación, carecen de fundamentos científicos que las respalden. Estos falsos mitos pueden llevarnos a utilizar técnicas de limpieza que en realidad no son efectivas, y en algunos casos, pueden incluso ensuciar más nuestro hogar. Para ayudarte a mantener tu hogar limpio y ordenado de manera efectiva, vamos a desmentir los mitos más comunes sobre la limpieza en el hogar.

La lejía no es la solución para todo

Aunque la lejía es muy útil para eliminar manchas de ropa y desinfectar superficies, no es efectiva para limpiar la grasa acumulada en estufas o mostradores. Para obtener mejores resultados en la limpieza, es necesario mezclar la lejía con otros productos de limpieza.

No olvides limpiar tu lavadora y lavavajillas

A menudo pensamos que los electrodomésticos destinados a la limpieza, como la lavadora y el lavavajillas, no necesitan ser limpiados, pero esto es un error. Un mantenimiento inadecuado de estos electrodomésticos puede hacer que se acumule polvo y suciedad, lo que puede afectar la limpieza de nuestra ropa y platos. Por ello, es importante mantenerlos limpios y en buen estado. Si no sabes cómo hacerlo, consulta nuestros consejos para limpiar el lavavajillas y la lavadora.

El buen olor no siempre significa limpieza

Un hogar con un buen olor no siempre es sinónimo de limpieza, ya que muchos productos químicos tienen perfumes que no necesariamente los hacen efectivos. Es importante fijarnos en otros aspectos para asegurarnos de que nuestro hogar está limpio y en buen estado.

Hay zonas más sucias que el baño

Aunque solemos pensar que el baño es la zona más sucia de la casa, en realidad existen otros lugares donde se acumulan más bacterias, como la nevera o los paños de cocina. Además, algunos objetos que utilizamos con frecuencia, como el teclado del ordenador, pueden contener cientos de veces más gérmenes que un inodoro.

Los plumeros no son efectivos para eliminar el polvo

Aunque a menudo utilizamos los plumeros para eliminar el polvo de las superficies, en realidad lo que hacen es esparcirlo aún más. Es mejor utilizar paños húmedos, aspiradoras o paños de microfibra para recoger y retener el polvo.

No necesitas usar más jabón del necesario

Aunque es común pensar que utilizar más jabón o detergente para limpiar la ropa o la vajilla dará mejores resultados, en realidad puede ser contraproducente. Lo importante no es la cantidad de jabón que usemos, sino aplicar la cantidad justa para obtener los mejores resultados.

El vinagre no es apto para todas las superficies

En ocasiones anteriores hemos hablado sobre la eficacia del vinagre para limpiar determinados aparatos. Es indudable que aporta múltiples beneficios, ya que es un buen quitagrasas, acaba con la cal y, además, es un remedio ecológico y económico. Por eso es especialmente adecuado para la eliminación de marcas de agua en accesorios, así como para desatascar electrodomésticos y para limpiar ventanas y cafeteras. A pesar de ello, tenemos que evitar usarlo en ciertas superficies, como encimeras de granito y mármol, suelos de madera o baldosas de piedra, que se pueden ver dañadas por el ácido del vinagre.

Es mejor lavar la ropa en frío

A veces resulta complicado saber qué prendas se deben lavar en caliente, ya que el agua a elevadas temperaturas a veces encoge o daña la ropa. Por eso, solemos utilizar agua fría para lavar determinadas prendas, ya que algunas de ellas no se lavan bien a bajas temperaturas. Sin embargo, la tecnología de las lavadoras ha ido evolucionando con el paso del tiempo, de forma que actualmente podemos encontrar modelos con programas de lavado en frío que son tan efectivos como los que utilizan temperaturas elevadas.

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