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¿Para qué sirve un deshumidificador?
Como su nombre indica, se utiliza para reducir la humedad del aire en el ambiente. El aire está compuesto por dos gases principales: nitrógeno en un 78% y oxígeno en un 21%, como norma general. Por tanto, nos falta un 1%, que pertenece a otros gases, entre los que se encuentra el vapor de agua. Lo que significa que la humedad que tanto nos afecta no supone ni el 1% del aire que nos rodea.
Los niveles recomendados de humedad relativa están entre el 30% y el 70%; idealmente, entre el 40% y el 60%. Es decir, de todo el vapor de agua que es capaz de contener el aire, hay que intentar mantenerlo por debajo de un 60%. En función de la época y la ubicación, puede que los niveles sean óptimos, pero esto sube rápidamente cerca de la costa o de ríos, cuando hay aglomeraciones de gente en una sala o en los meses de verano. Ahí es donde cobran especial importancia estos dispositivos.
Quizá te preguntes sobre las consecuencias de no controlar una humedad excesiva. Si estás en un ambiente con unos niveles excesivos, notarás que te cuesta más respirar, la piel sudará más de lo habitual y, si se llegase a superar el 100%, el aire estaría saturado, no podría absorber más vapor, el exceso se condensaría y se generaría agua líquida.
¿Cómo funciona un deshumidificador?
El esquema general del funcionamiento es sencillo. Absorbe aire del ambiente, en su interior provoca que parte del vapor de aire se condense y expulsa el aire con menor humedad relativa tras recuperar su temperatura inicial. En resumen, transforma parte del vapor del aire en agua líquida, eliminándolo del ambiente.
Esto se consigue con un ciclo termodinámico para el que se necesitan cambios de temperatura y flujos de aire de distintas temperaturas. Ese choque térmico es el que causa la condensación necesaria. Para ello, se necesitará energía eléctrica, como podías imaginar, por eso funcionan enchufados a la red.
¿Qué deshumidificador comprar?
Para elegir el correcto, debes fijarte en varias características. Todas ellas afectan al precio del deshumidificador.
Como cualquier aparato eléctrico, la potencia máxima es importante. Esto afectará al caudal de absorción y de los litros que será capaz de tratar. Un deshumidificador normal ronda los 20l diarios, pero los hay de 18, 24, etc.
No confundas ese dato con la capacidad del depósito, que siempre es menor. Se debe vaciar el depósito antes de que se llene.
También te recomendamos tener en cuenta la marca y algunas recomendaciones que te hacemos son los deshumidificadores Midea y los deshumidificadores Taurus . Con toda esta información seguro que ya puedes comparar y elegir el que mejor se adapte a tus necesidades. Además, puedes contactar con nosotros para que te demos una recomendación personalizada.
