Los RAEE (residuos de los aparatos eléctricos y electrónicos) pueden contener sustancias peligrosas y gases perjudiciales para la salud que dañan la capa de ozono y afectan al calentamiento global.

Por lo tanto, saber dónde tirar los electrodomésticos antiguos es esencial para cuidar el medio ambiente y la salud de las personas. En este post te contamos cuál es la mejor forma de reciclar los electrodomésticos.

Dónde tirar los electrodomésticos

Cuando un electrodoméstico deja de funcionar, debemos llevarlo al punto limpio más próximo. Los puntos limpios son aquellos espacios que ofrece el Estado para la recogida de residuos especiales. Los ciudadanos lo suelen utilizar para llevar sus antiguos electrodomésticos, pero en estos espacios también se reciclan dispositivos como móviles, ordenadores, televisores o cartuchos de tinta, entre otros.

Existen dos tipos de puntos limpios: los puntos limpios fijos y los móviles. Los primeros son aquellos que se ubican de forma permanente en un lugar específico, normalmente lejos del centro de las ciudades. Los segundos cumplen la misma función que los anteriores, pero se desplazan por distintas zonas de la ciudad, facilitando la recogida de residuos de los habitantes de la población.

Categorías de aparatos electrónicos y eléctricos

• Pequeños aparatos: su dimensión no supera los 50 cm. En esta categoría se incluyen desde aparatos de cocina como hervidores eléctricos hasta aparatos para el aseo personal como maquinillas de afeitar eléctricas. También se integran aparatos de radio, cámaras, artículos deportivos, instrumentos musicales o aparatos de grabación de vídeo, entre otros.
• Grandes aparatos: su dimensión es superior a 50 cm. En esta categoría se integran lavadoras, secadoras, lavavajillas, equipos de música, herramientas eléctricas, productos sanitarios, equipos de informática, equipos deportivos, etc.
• Intercambio de temperatura: aparatos como frigoríficos, congeladores, equipos de aire acondicionado, bombas de calor y otros aparatos de intercambio de temperatura que utilicen fluidos que no sean agua.
• Monitores y pantallas: pantallas, televisores, monitores, portátiles y marcos digitales para fotos con tecnología LCD.
• Lámparas: lámparas fluorescentes, lámparas de descarga de alta intensidad, incluidas las lámparas de socio de presión y las de haluros metálicos, lámparas de sodio de baja presión y lámparas LED.
• Equipos de informática pequeños: calculadoras, GPS, móviles, ordenadores personales, impresoras y teléfonos.
• Paneles fotovoltaicos: con una dimensión superior a 50 cm con silicio y paneles fotovoltaicos con teluro de cadmio.

Otras alternativas para reciclar electrodomésticos

Además de tirarlos a los puntos limpios, existe otra alternativa: donarlos. En caso de que el electrodoméstico se encuentre en condiciones óptimas, puedes ofrecérselo a otras personas que lo necesiten. Para ello, lo ideal es buscar asociaciones en tu localidad que se encarguen de repartir estos aparatos a aquellos ciudadanos que no se puedan permitir comprar nuevos electrodomésticos.

Por último, si vas a comprar un electrodoméstico en nuestra tienda de electrodomésticos online, puedes contratar el servicio de instalación, que incluye la subida a domicilio, la instalación del electrodoméstico y la retirada del antiguo. De esta manera, no tendrás que preocuparte por nada, ya que nosotros nos encargaremos de llevar el aparato a un punto de reciclaje.

Ahora que ya sabes dónde tirar los electrodomésticos antiguos, puedes seguir contribuyendo a la protección del medio ambiente, pues tendrás la certeza de que en los puntos limpios harán todo lo necesario para reducir el impacto ambiental y reciclar estos aparatos.