Las vinotecas pequeñas son perfectas para aquellos hogares que no disponen de mucho espacio pero no quieren renunciar al placer que supone disfrutar de un buen vino. ¿Quieres descubrir cuáles son las ventajas de estas vinotecas? Así, seguro que te animas a instalar una en casa.

Ventajas de las vinotecas pequeñas

• Son fáciles de ubicar. Debido a sus dimensiones reducidas, las vinotecas se adaptan a todos los espacios, incluso a los más pequeños. Por lo tanto, no tendrás problemas a la hora de encontrar su ubicación ideal.
• Ayudan a distribuir los vinos correctamente. Al igual que el resto de vinotecas, las vinotecas pequeñas son la mejor opción para mantener las botellas de vino en perfecto orden y prolongar su vida útil.
• Existen neveras monotemperatura o multitemperatura. Las primeras mantienen la misma temperatura, mientras que las segundas están dotadas de dos o tres zonas con diferentes temperaturas, por lo que son ideales para almacenar diferentes tipos de vino.
• Te permiten poseer una selección de vinos propia. Las vinotecas pequeñas son perfectas para guardar varias botellas de vino en las mejores condiciones. De esta manera, podrás disponer de ellas cuando lo desees.
• Son económicas. No es necesario realizar un gran desembolso de dinero, por lo que por un precio no muy elevado podrás disfrutar al máximo del aroma y el sabor de tus vinos favoritos.
• Aportan un toque sofisticado. El diseño de las vinotecas las convierte en aparatos elegantes y sofisticados que aportan un toque de distinción a la estancia en la que se instalen.

Tipos de vinotecas pequeñas

Las vinotecas pequeñas se pueden diferenciar por su refrigeración o por su ubicación. Respecto a su refrigeración, existen dos tipos: las vinotecas monotemperatura, que disponen de un solo rango de temperatura para enfriar toda la cavidad; y las vinotecas multitemperatura, que incorporan varias zonas de refrigeración con diferentes temperaturas. Si te haces con una vinoteca multitemperatura, podrás colocar diferentes tipos de vino a la temperatura óptima. La parte superior es ideal para guardar vinos blancos, rosados y cavas, ya que el rango de temperatura oscila entre 5 y 10 ºC. Por su parte, la parte inferior es el lugar perfecto para almacenar vinos tintos, puesto que la temperatura oscila entre 10 y 18 ºC.

En cuanto a su ubicación, también encontramos dos tipos de vinotecas: las vinotecas de libre instalación, que se pueden colocar en cualquier lugar de la estancia; y las vinotecas integrables, que se encajan en un espacio limitado. En caso de que prefieras una vinoteca integrable, debes tener en cuenta que es necesario mantener una separación lateral de unos 10 cm con el resto del mobiliario para que la ventilación y el funcionamiento sean los correctos. Si, por el contrario, vas a optar por una vinoteca de libre instalación, podrás colocarla en cualquier espacio sin dejar una distancia lateral mínima porque su ventilación es delantera.

Mantenimiento de las vinotecas pequeñas

El mantenimiento de estas vinotecas es muy sencillo, pues basta con revisar los niveles de humedad y de temperatura de vez en cuando para comprobar que todo está en orden. En caso de que incluyan sensores para realizar esta función, no será necesario que lo hagas tú. Además, deberás limpiar los ventiladores y cambiar el filtro de carbono una vez al año para evitar malos olores, problemas en el rendimiento del motor o variaciones de temperatura o humedad. Visita nuestra web para encontrar la vinoteca que encaje contigo.